7mo día
Nos despertamos muy contentos. Si bien la puntualidad no es la característica de algunos, frente a la idea de perdernos parte de Londres, todos dessyunamos y subimos al bus. Este sería un viaje de unas 4 y 1/2 horas por lo que haríamos una parada obligatoria para que nuestro querido Mark (el paciente conductor escocés), pueda descansar el tiempo reglamentario. La realidad es que la mayoría de nosotros nos quedamos dormidos, knockeados, desmayados, desplumados... pero al llegar a Londres, con su majestuosidad, su imponencia, su carácter, parecíamos búhos. Eyes wide open!!!!!! Antes de pisar suelo londinense agradecimos a Mark su amabilidad, simpatía y buena disponibolidad escribiéndole cálidos mensajes de despedida.
Punto aparte fue acarrear los bártulos por la vereda ya que el bus no podía parar en la puerta. Fue una cosa tragi cómica. En eso los boys del equipo fueron más que una ayuda. Well done my boys!!!!! And thanks a bunch for that.
El lobby del Generator fue todo lo que esperábamos y más. Un lugar ideal para ellos. Sin embargo, al ver que no cumplía con parte de las condiciones pervistas con respecto a las habitaciones, al día siguente nos mudaríamos al Royal National Hotel.
Pero no nos quedaríamos esperando el día siguiente. Por lo tanto, este grupo lleno de buena onda y energía partimos rumbo a Camden Street. Cómo describir lo vivido allí? Lo gintage mezclado con lo artesanal, el sushi entre stands de baratijas, los aromas de comida desconocidos para nosotros junto al fabricante de carteras de cuero, la casa de los encajes, los discos raros, lass lámpars turcas, los cafecitis con onda parisina, y gente, un mar de gente hablando en 100 idiomas distintos, elegantes, casual, freaky... a algunos les gustó más y a otros menos, pero era un lugar para conocer, sin duda.
Nos despedimos de Camden y rumbeamos para Covent Garden. Qué cambio!
Y, sí. Slgo mucho más conservador, sin duda. Los mini shops super bien decorados, entramos y salimos de muchos de ellos mientras se escuchaba a la cantante de ópera en el piso inferior y a más de uno se nos ponía la piel de gallina... Hasta entramos al Disney Store!!!!!! Todos nos volvimos peques por un momento. Algunos jugaron con pulpos y Nemo, otras preguntaban hasta qué talle eran los vestidos de princesa, otros pensaban qué elegir para un primito, sobrino, hermano menor... pero lo cierto es que se los pudo ver niños por un buen momento.... Qué lindo! Y así salimos con un miembro más que nos acompañaría el resto del viaje. La aristogata de Celi!!!!!!!! Tierna!!!!!!!!
A apurarse porque la comida está incluída y no es cuestión de pagar de más. Como fue medio escasani, nos compensaron con pizzas y papas fritas que devoramos hasta casi "explotar".
A dormir todo el mundo. El lunes promete ser el comienzo de una semana a todo ritmo... y, por sobre todas las cosas, empieza el College!!!!!!!!